lunes, 14 de agosto de 2017

Safari nocturno a las afueras de Albacete

    Interrumpo la serie de entradas sobre mi viaje a Galicia para subir esta sobre el pequeño paseo que dimos anoche por los alrededores de Albacete. Después de la noche de las Perseidas que organizamos para bichear y observar el espacio en la Siera de Chinchilla, y aunque lo pasamos en grande (risas, chocolate, estrellas fugaces enormes, arañas chulas como Cyrtauchenius walckenaeri), lo cierto es que yo me quedé con ganas de más, así que propuse ir a de safari nocturno por las afueras de Albacete capital la noche siguiente. Quedamos varios integrantes del grupo de Fauna y Flora de Albacete en la entrada del Jardín Botánico de Castilla-La Mancha a las 21.45h para explorar el camino que conecta la ciudad con el parque periurbano "La Pulgosa". Sabemos que, debido a las zonas ajardinadas que lo flanquean y por estar rodeado de campos de cultivo, este corredor atrae muchos animalitos interesantes. Lo primero que vimos fue un magnífico búho chico (Asio otus) que salió volando del Jardín Botánico y nos sobrevoló a muy pocos metros. Permaneció menos de un minuto volando entre las farolas y luego desapareció en la lejanía oscura. Después se nos unió otro naturalista, Pablo, con quien pudimos ver un bonito erizo europeo (Erinaceus europaeus), de los pocos que quedan ya en torno a nuestra ciudad. Yo preferí no hacerle foto y mirarlo, pero Rafa Torralba sí lo hizo y así de guapo salió el pequeño insectívoro:
Erizo europeo (Erinaceus europaeus). Foto de Rafa Torralba.
    Tras despedirnos del erizo y de varios amigos, los pocos que quedamos seguimos encaminados hacia La Pulgosa. Por el camino observamos varios animalitos interesantes:
Un pequeño cárabo con la cabeza muy grande, del género Acinopus.
Gorgojo (curculiónido) sin identificar.
Ejemplar macho de Iris oratoria.
Larinus carlinae
Grillo de matorral de la especie Phaneroptera nana, ejemplar hembra.
    Las protagonistas del lugar volvieron a ser las arañas lobo (licósidos) de las especies Lycosa hispanica y Hogna radiata. Yo diría que son los leones en miniatura del mundo artrópodo. Cazadoras tranquilas, rápidas y directas, grandes e imponentes, recorren los suelos de la noche en busca de pequeños insectos, sobre todo saltamontes, que llevarse a los quelíceros.
Hogna radiata, este ejemplar estaba muerto.
Lycosa hispanica.
Enorme hembra de Hogna radiata con un curioso patrón de color.
    En La Pulgosa, observamos algunos tenebriónidos (Akis acuminata, Blaps waltlii) y más Acinopus sp. Lo más interesante fue un macho de grillo bimaculado (Gryllus bimaculatus).
Akis acuminata intentando copular mientras son atacados por una marabunta.
Grillo bimaculado (Gryllus bimaculatus), macho. 
Babosa valenciana (Ambigolimax valentianus).
    Finalmente, recorrimos otra vez la vía verde volviendo a casa, encontrando por el camino otros dos arácnidos "nuevos", una araña cangrejo y un solífugo, y una salamanquesa. Fue una buena noche que pasamos explorando nuestra ciudad en busca de sus otros inquilinos.
Araña cangrejo (Thomisus onustus) a punto de "dar a luz" en su nido de seda.
Solífugo (Gluvia dorsalis).

2 comentarios:

  1. Que maravilla Guillermo, a mi me encanta salir de noche y observo cada rincón con la esperanza de encontrar algún bicho, preciosas fotos, un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Un Safari que nada envidia a los de las agencias de viaje. Sin duda la naturaleza es sorprendente ahí donde se la observa y en toda la variedad de sus manifestaciones.

    ResponderEliminar

Trato de responder a todos vuestros mensajes, aunque sea solamente para dar las gracias.